Vallkirias Pisuerga, las guerreras vallisoletanas que 'reman' unidas dentro y fuera del agua

El cáncer de mama les cambió la vida, y a pesar de las dificultades, el cáncer de mama les hizo ser más fuertes. Vallkirias Pisuerga es un club deportivo de piragüismo en la modalidad de Dragon Boat formado por 55 vallisoletanas, que nació como una terapia para mejorar su condición física y psicológica tras su diagnóstico y tratamiento de cáncer de mama, y a día de hoy este deporte es su alegría diaria. Para ellas, subirse al barco es "dejar atrás el miedo, el dolor y las cicatrices", y sobre todo recorrer el río Pisuerga en su embarcación les hace sentirse "vivas, libres y fuertes".

Así nos lo cuentan en el número 5 de la revista D Castilla y León Nachi García, Begoña Uña, Consuelo Conde y María Ballesteros, cuatro valientes y luchadoras, que junto al resto de integrantes de Vallkirias Pisuerga dejaron atrás el miedo, y decidieron que su futuro pasaría por el coraje y la fuerza. Son y quieren ser un ejemplo de superación tanto para ellas mismas como para otras mujeres que estén o hayan estado en tratamiento de cáncer de mama. Según el Observatorio de la AECC, el cáncer de mama es uno de los tipos de cáncer con mayor incidencia en nuestro país, siendo el primero con mayor impacto en las mujeres de Castilla y León, y el segundo, por detrás del de próstata, a nivel general.

En concreto, en 2024 se diagnosticaron en nuestra Comunidad 159 nuevos casos de cáncer de mama por cada 100.000 habitantes, 183 de próstata y 108 de colorrectal, que son los tres tipos de cáncer con mayor incidencia en la región. Cifras que se convierten en vidas quebradas, pero que en algunos casos, como los de estas 55 mujeres de Valladolid se traducen en nuevas ganas de vivir y comerse el mundo. Conozcamos un poco más a Vallkirias Pisuerga y su evolución hasta ser hoy incluso Campeonas de España. 

Pregunta. ¿Cómo se definen las luchadoras de Vallkirias Pisuerga?

Respuesta. (Nachi García) Como un grupo de mujeres que se unen por una causa común, el haber padecido una enfermedad como ha sido el cáncer de mama y quieren mejorar su forma de vida ya sea física o psíquica. Queremos tener esperanza, ilusión por algo nuevo, abrir una ventana a la superación, compañerismo, ayuda, apoyo... y sobre todo no sentirnos solas en ningún momento. Somos mujeres guerreras con ganas de superar lo que les ha pasado, sin rendirse, pensando que "sí se puede salir" de una situación que en un momento dado era impensable. Juntas somos más fuertes. 

P. ¿Qué es lo mejor que os ha dado este equipo y el piragüismo?

R. (Begoña Uña) Lo mejor ha sido sin duda el apoyo mutuo, la amistad y la sensación de pertenencia. Hemos creado una familia que palea unida, no solo en el agua, sino también en la vida. El barco dragón nos ha devuelto la confianza en nosotras mismas y nos ha recordado que estamos vivas, fuertes y capaces.

P. ¿Qué tiene de especial la modalidad en la que comenzasteis y ahora estáis compitiendo, el Dragon Boat?

R. (María Ballesteros y Begoña Uña) Tiene mucho de especial, principalmente destacaríamos que en un barco vamos doce personas, diez palistas, un tamborilero y un timonel, con lo que es un deporte de equipo. Ese es el mayor atractivo para nosotras, 'palear juntas'. Además de que los barcos son preciosos, llevan en la proa una cabeza de dragón y en la popa una cola. El Dragon Boat es especial porque no se trata solo de competir, sino de sincronizar corazones. Paleamos juntas, al unísono, y eso crea una conexión única.

P. ¿Qué sentís cada vez que os subís a la embarcación?

R. (B.U.) Nos sentimos vivas, libres y fuertes. Subirnos al barco es dejar atrás el miedo, el dolor y las cicatrices. Es un espacio donde solo importa el ahora, el equipo y el ritmo de cada palada. Además, hacerlo en un entorno como el río Pisuerga nos ayuda a evadirnos y a conectar con la naturaleza. 

P. ¿Cuántas mujeres formáis el equipo Vallkirias Pisuerga? ¿En qué año fundasteis el equipo? 

R. (N.G.) Somos 55 mujeres, algunas en estos momentos siguen en tratamiento o les han tenido que realizar alguna intervención. La asociación se formó en febrero del 2022.

P. ¿Cómo fueron los inicios? 

R. (N.G.) Al principio era un sueño inalcanzable. Todo surgió a través de un libro que me recomendó mi fisioterapeuta y en él encontré esta modalidad de piragüismo que parecía ser muy recomendable para mejorar todo el torso superior y así fue. En los comienzos no sabes ni por dónde empezar, pero lo primero era conseguir un club para poder federarnos y salir al agua. Escribí a todos los clubes que existían en Valladolid, y realmente nadie contestaba, hasta que la insistencia es el mejor medio para conseguir las cosas. Me puse en contacto con el Club Cisne y ellos fueron los primeros que nos acogieron, el tiempo que estuvimos nos apoyó mucho Patricia Coco, piragüista de aguas tranquilas, pero nuestra progresión no avanzaba. 

Necesitábamos un barco, ya que al principio salíamos con una canoa canadiense, donde las condiciones no eran las adecuadas para realizar el ejercicio que necesitábamos, pero por otro lado nos sentíamos contentas y agradecidas. Había que buscar patrocinadores para conseguir el barco y gracias al apoyo imparable de mi marido, y lo logramos, pero había que encontrar un lugar para guardarlo ya que sus dimensiones eran de 11,5 metros. Tras recorrernos todas las orillas del Pisuerga, acudimos a Alberto Bustos, el que era en aquel momento el concejal de Deportes en el Ayuntamiento, y nos facilitó la Federación Narciso Suárez con tan buena suerte, que el mismo Narciso Suárez, piragüista olímpico, se convertiría en nuestro futuro entrenador. 

P. ¿Cuál es el mensaje que trasmitís a las mujeres que se interesaban en la iniciativa tras ser pacientes o supervivientes de cáncer de mama?

R. (N.G.) El mensaje que trasmito siempre es que en la vida no hay que rendirse, hay que luchar por salir de ese agujero negro que en un momento determinado nos ha tocado sufrir. Me gusta mucho esta frase que dice, "Cuando sientas que vas a rendirte piensa por qué empezaste". El miedo te hace pequeño y hay que apartarlo con toda nuestra fuerza interior. 

P. ¿Vallkirias Pisuerga es un proyecto y un equipo abierto a nuevas participantes?

R. (B.U.) Sí, totalmente. Vallkirias Pisuerga es un equipo abierto, inclusivo y solidario. Invitamos a cualquier mujer que haya pasado por un cáncer de mama a unirse a nosotras, sin importar su condición física. Aquí todas empezamos desde cero, pero ninguna lo hace sola. 

P. ¿Cuáles han sido los últimos premios o reconocimientos que habéis recibido en campeonatos? 

R. (Consuelo Conde) Este año hemos conseguido medalla de oro, plata y un séptimo puesto con tres tripulaciones en el primer Campeonato de España de 2000 metros en Sevilla. En el Campeonato de Castilla y León de barco dragón en la distancia de 500 metros, participando en diferentes categorías, nos llevamos la medalla de bronce. También, seis vallkirias fueron convocadas para formar parte de la Selección Española para participar en el XVII Mundial de Barco Dragón en Brandemburgo.

P. ¿Cómo valoráis el apoyo que os brinda la ciudad y los vallisoletanos?

R. (B.U.) Nos sentimos muy arropadas. Fuimos las pregoneras de las Fiestas de la Virgen de San Lorenzo 2024 y fue un honor inmenso y una muestra de cariño de toda la ciudad. Valladolid nos hace sentir parte de algo muy grande. Además, el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, siempre nos ha mostrado su gran sensibilidad y apoyo, ya que nos acompaña en momentos importantes y valora el esfuerzo y el mensaje que transmitimos. Ese respaldo institucional y emocional significa mucho para nosotras. 

P. ¿Cómo ha cambiado vuestra vida desde que os diagnosticaron cáncer de mama, pasando por el tratamiento, recuperación y ahora siendo deportistas y casi profesionales de remo?

R. (C.C) En mi caso, al tener metástasis, aunque de momento está controlado sigo con tratamiento cada tres semanas. El hacer este deporte ha cambiado mi vida desde el minuto uno. Te engancha de tal manera que estoy deseando que llegue el día para poder ir a entrenar, además he encontrado gente con la que poder hablar abiertamente si tengo ganas de desahogarme y escuchar si alguien lo necesita. Somos una gran familia y lo más importante, es que he hecho grandes amigas. 

P. ¿Qué beneficios habéis notado desde que practicáis este deporte en vuestra recuperación?

R. (M.B.) El primero y fundamental es el psicológico. Normalmente llegamos al equipo muy tocadas psicológicamente, y aquí no hace falta hablar de lo que has pasado. Entre nosotras nos entendemos sin tener que dar explicaciones. El segundo beneficio y no menos importante es la mejora de todo el torso superior a nivel dorsal, pectoral y escapular. 

P. ¿Os apoyan los especialistas y médicos que os atendieron durante vuestro tratamiento?

R. (C.C) Mi oncólogo sabe desde el primer día que me dedico a este deporte y se sorprende y me felicita cada vez que le digo lo que vamos consiguiendo. Siempre me ha animado a hacer deporte, siempre y cuando me siga encontrando bien. 

P. ¿Cuál es vuestro lema para que muchas mujeres que estén pasando por lo que vosotras pasasteis sigan vuestro ejemplo?

R. (B.U.) 'Dragonas, corriente en contra no dejéis de palear', ese es nuestro lema. Porque si hemos transformado un diagnóstico en un nuevo comienzo, muchas otras también podrán hacerlo.